lunes, 21 de enero de 2013

Capítulo 21: Tensión y ¡sorpresa!


Perseguir a la pequeña Takano entre toda la multitud que disfrutaba del festival escolar en el interior del edificio resultó imposible, por lo que Aomine la perdió de vista después de correr tras ella unos pocos metros. Tener ese cuerpo diminuto era una ventaja en un momento como ese, ya que podía meterse entre la gente con facilidad.

-         ¡Maldición! – exclamó de mal humor, asustando a un grupito de chicas que pasaba por su lado comiendo manzanas de caramelo.

Kurosawa y Kise llegaron hasta él. La chica llevaba torcido el delantal del traje de sirvienta, que se colocó mientras miraba alrededor.

-         Pensé que habías parado porque habías alcanzo a Hiyo-chan – dijo.

-         ¿Qué ha pasado? – preguntó Kise confundido.

-         La he perdido de vista entre tanta gente – dijo Aomine pasándose la mano por la cabeza. Empezaba a agobiarse con todo el asunto.

Las chicas de alrededor comenzaron a fijarse en el rubio, reconociéndole como Kise Ryōta, el famoso modelo de revistas juveniles. Kurosawa, dándose cuenta de lo que estaba pasando, los agarró a ambos del brazo y tiró de ellos hasta un aula vacía. Cerró la puerta corredera con un portazo, dejando claro que no querían ser molestados.

-         Hacer esto todo el tiempo es agotador. ¿No te molesta que te acosen de esa manera? – dijo dándose la vuelta y mirando a Kise.

Él se encogió de hombros.

-         Por lo general, no vienen en grupos tan grandes. Quizá debí hacer caso a Aominecchi y disfrazarme un poco... – dijo pensativo.

-         Eso no me importa ahora mismo. Me gustaría encontrar a Takano-san. Gracias – dijo Aomine de malas maneras.

-         Pero, ¿qué ha pasado? – volvió a preguntar el rubio - ¿Y por qué estás tan tenso y desesperado?

-         La culpa ha sido tuya, ¿por qué demonios has dejado que echara a correr? – dijo Kurosawa encarando al chico moreno con los brazos en jarras.

-         ¿¡Mía!? ¿Quién ha sido la que ha dicho esa tontería sobre las tetas?

-         ¡Lo dije para darte la oportunidad de decirle que no te importaba su pecho plano!

-         ¿De qué hablas?

-         Hiyo-chan me dijo que tú le habías dicho a su hermano que te gustaban las tías con las tetas grandes. Al parecer, Hiyo-chan tiene un pequeño complejo con sus tetas desde entonces y, por eso, dije eso... ¡para que tú le dijeras que no te importaba!

-         ¿Cómo demonios esperabas que supiera todo esto? ¿Por ciencia infusa? – Aomine se sentó en una mesa y apoyó los codos en las rodillas.

-         ¿Alguien puede explicarme lo que está pasando? – Kise parecía aún más confundido.

-         Hiyori y Aomine se gustan, pero son un poco lentos, así que les doy pequeños empujones para que espabilen.

-         ¿Quién ha dicho que ella me gus...?

-         Oh, vaya – Kise se rascó la cabeza y se sentó en la mesa contigua a la de Aomine - ¿Te gusta Takacchi? – suspiró – Supongo que me daré por vencido antes de empezar nada... Para una chica que me interesaba un poco... Aominecchi, te cedo a Takacchi. Trátala bien – dijo fingiendo un tonillo solemne.

-         Vaya con Hiyo-chan, “the heartbreaker” – murmuró Kurosawa.

Aomine frunció el ceño y miró a Kise. ¿Takano le interesaba? La había visto incluso menos veces que él mismo... Espera, eso no era lo que importaba. No quería que el rubio se acercara a Takano y menos ahora, que ella le había prometido que se confesaría. No quería admitirlo, pero en el fondo, estaba esperando que lo hiciera. Era solo que... apenas se conocían y, seguramente, todo terminaría igual que con el resto de chicas. Se cansarían de que Aomine prestara tanta atención al baloncesto, de que nunca las llevara a citas en sitios bonitos y ese tipo de cosas que les gustaba a las chicas.

Pero... antes de que nada pasara, tenía que encontrarla y aclarar la tontería que acababa de pasar.

Se bajó de la mesa y miró a Kurosawa.

-         ¿Tienes alguna idea de dónde puede estar?

Ella suspiró.

-         Imagino que estará en la azotea. Es el único sitio tranquilo ahora mismo, supongo.

Él no necesitó más y, sin decir una palabra, salió de la clase dando zancadas, dejando a Kise y a Hikari mirando la puerta.

-         ¿No te molesta? Has dicho que te interesaba Hiyo-chan, ¿no? – preguntó ella.

El rubio se encogió de hombros.

-         Es la primera vez que veo a Aominecchi actuando de esta manera... y me alegro de que haya sido antes de que pudiera pillarme por ella de verdad.




Hiyori estaba apoyada en la barandilla, mirando el festival bajo sus pies. Todo el mundo gritaba alegremente, paseando de un puesto a otro, comprando comida y chorraditas que habían hecho los estudiantes de la preparatoria. Se lo estaban pasando en grande.

Suspiró. Ahora se sentía realmente idiota por haber salido corriendo de esa manera. ¿Y qué si no tenía pecho? No debería haber huido. Seguramente todos pensaban que era exactamente eso, una idiota. Apoyó la frente en la barandilla, haciendo tintinear el cascabel que tenía al cuello.

-         Así que de verdad estabas aquí – dijo una voz a su espalda.

Hiyori sintió que su corazón se detenía por el susto. Al darse la vuelta, vio que Aomine se acercaba a ella, que no sabía qué hacer. ¿Por qué no podía abrirse la tierra y tragársela? Se sentía completamente humillada, ¿por qué tenía que ser justamente él quien la encontrara?

-         ¿Qué... qué haces aquí? – preguntó.

-         Quería hablar contigo y Kurosawa me dijo que, probablemente, estarías aquí.

-         ¿De qué quieres hablar? – Hiyori volvió a girarse, para mirar los puestos del festival y darle la espalda a Aomine, así estaría menos nerviosa.

Él se acercó hasta donde estaba ella y también se apoyó en la barandilla, a su lado. Kise tenía razón, estaba realmente adorable vestida de gato, con su pequeño cuerpo enfundado en esa tela que se ajustaba como una segunda piel y las orejitas sobresaliendo de su cabeza.

-         No me importa lo más mínimo el tamaño de tu pecho, Takano-san – dijo él de sopetón.

-         ¿Qué?

Hiyori le miró con los ojos muy abiertos y las mejillas coloradas. ¿Por qué demonios tenía que decir las cosas de manera tan directa? ¡Siempre hacía lo mismo!

-         Estabas preocupada por eso, ¿no? – él pareció confundido – Solo quería aclararlo. No hay nada malo en ti, Takano-san, así que deja de preocuparte por esas cosas – Aomine se llevó la mano a la nuca, incómodo.

Ella estaba todavía más confundida que él. ¿Qué trataba de decir con todo aquello? Acaso...

-         Maldición, nunca se me han dado bien las palabras – dijo Aomine con brusquedad y perdiendo la paciencia.

Agarró la barbilla de la joven, se agachó y capturó sus labios con un beso, dejando a Hiyori completamente pasmada y sin saber qué hacer. Ni en sus más locos sueños se habría imaginado que él la besaría. Pero... lo estaba haciendo. Apretó los puños a ambos lados de su cuerpo y se quedó ahí, frente a él, dejándose besar, mientras Aomine acariciaba su mejilla con suavidad.

Él frunció el ceño ante su falta de respuesta y, al separarse de ella, observó que ella le miraba como si estuviera ida, con los grandes ojos brillantes, los labios entreabiertos y las mejillas de un color escarlata intenso.

-         Sorpresa –bromeó él, que no puedo resistir la tentación de inclinarse y besarla de nuevo.

5 comentarios:

  1. Vaya par, VAYA PAR. JAJAJAJAJAJAJAJA Este Aomine habrá tenido que doblarse por la mitad para alcanzar a besarla xDDDD Lo bueno es que por fin se dejan de polladas... me gusta el ritmo que está cogiendo ^^

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    1. JAJAJAJAAJJAAJ HASTA DE RODILLAS ES MÁS ALTO QUE ELLA xDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD Esperemos que se inventen algo para veces futuras o la espalda de Aomine no durará... ni el cuello de Hiyori xDDDDDDDDD
      Bueno, eso de que se dejen de polladas... ya veremos xDDDDDDDDDD Tienen muchos "tira y afloja" aún por delante xDDDDDDDDDDDDD
      A mí me gustas tú >.<

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  2. Al final Kise no será un estorbo en la relación, jo, yo quería que la liase un poco y hubiera puñetazos o algo :C

    ¿Por qué siempre todos los momentos íntimos son en azoteas? xDDD Ains, a Aomine sólo le queda ganarse a Hiyori a base de actos y no con palabras porque la volverá a liar xD

    Planicies for the win~

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    1. Tranquilo, meteré a otro xDDDDDDDDDD Es que no quería que Aomine y Kise se pelearan :C Pero ya tengo pensado qué hacer MUAHAHAHAAHAH

      Porque las azoteas molan *.* Son tan cukis jajajaja Sí, cada vez que Aomine abre la boca sube el pan xDDDDDDDDDDDD

      Yeah~~~

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  3. Que monada...!!!!!!! Me encanta esta parejita joooo :)

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